Donde Se Inyecta La Insulina?

Donde Se Inyecta La Insulina
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El abdomen, al menos a 2 pulgadas (5.1 cm) del ombligo. El abdomen es el mejor lugar para inyectar insulina. Esto es porque la zona abdominal puede absorber la insulina de la manera más regular. El frente de los muslos. La insulina suele absorberse más lentamente desde este lugar. Puede absorberse más rápidamente aquí si hace ejercicio poco después de inyectarse la insulina. La región posterior de la parte superior de los brazos. La zona superior de las nalgas.

Rote el lugar de la inyección. Y en cada lugar, cambie ligeramente el punto de inyección cada vez que se inyecte insulina. Evite inyectarse exactamente en el mismo lugar. Usar el mismo punto cada vez puede formar bultos u hoyos en la piel. Por ejemplo, inyéctese la insulina en la parte superior del brazo izquierdo, la vez próxima en la parte superior del muslo, la vez siguiente en la parte superior del brazo izquierdo de nuevo pero un poquito más abajo que antes.

  • Revisado: 13 abril, 2022 Autor: El personal de Healthwise Evaluación médica: E.
  • Gregory Thompson MD – Medicina interna & Adam Husney MD – Medicina familiar & Kathleen Romito MD – Medicina familiar & Rhonda O’Brien MS, RD, CDE – Educador en diabetes certificado & David C.W.
  • Lau MD, PhD, FRCPC – Endocrinología & Heather Quinn MD – Medicina familiar Esta información no reemplaza el consejo de un médico.

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¿Dónde se aplican las insulinas?

Pluma de insulina – Algunas plumas usan cartuchos que se insertan en ellas. Otras se compran ya cargadas y se desechan después de haber usado toda la insulina. La dosis de insulina se marca en la pluma y la insulina se inyecta a través de una aguja.

Los cartuchos y las plumas que ya vienen cargadas con insulina contienen solamente un tipo de insulina. Si le recetan dos tipos de insulina, necesitará usar dos plumas.

Las inyecciones requieren menos capacitación que una bomba de insulina para poder usarse. Las inyecciones podrían costar menos. Las plumas son más fáciles de usar que las jeringas. Las plumas son portátiles y discretas. Las agujas de las plumas son pequeñas y finas: menos dolor.

Tanto las jeringas como las plumas son menos privadas que una bomba de insulina. No todos los tipos de insulina pueden usarse con una pluma. Con una jeringa se pueden mezclar dos tipos de insulina, pero con una pluma no se puede hacer lo mismo. Las plumas son más caras que las jeringas y quizás el seguro no las cubra. Si cada vez se inyecta la insulina cerca del mismo lugar, pueden formarse bultos duros o depósitos de grasa. Ambos problemas pueden ser antiestéticos y hacer que la insulina no cumpla tan bien su función.

El tamaño de una bomba de insulina es similar al de un teléfono celular pequeño. Le provee una dosis basal de insulina de acción breve o de acción rápida por hora. Cuando usted come o cuando el azúcar en la sangre es alto, usted decide la dosis de insulina y la bomba se la administra.

Han demostrado mejorar el nivel de A1c. Administran la insulina de manera más precisa. Administran la insulina de bolo de manera más fácil. Eliminan los efectos impredecibles de la insulina de acción intermedia o de acción prolongada. Ofrecen mayor flexibilidad con las comidas, el ejercicio y los horarios diarios. Pueden mejorar el bienestar físico y sicológico.

Pueden causar aumento de peso. Pueden ser caras. Riesgo de infección. Riesgo de cetoacidosis diabética (niveles muy altos de azúcar en la sangre) si el sistema se detiene o deja de funcionar correctamente. Pueden ser un recordatorio físico constante de que se tiene diabetes. Se necesita capacitación para usarlas.

La insulina inhalada se administra por medio de un inhalador oral que suministra insulina de acción ultrarrápida al comienzo de las comidas. La insulina inhalada se usa con una insulina inyectable de acción prolongada.

No es una inyección. Actúa muy rápido y es tan eficaz como las insulinas inyectables de acción rápida. Se puede administrar al principio de las comidas. Potencialmente, hay un menor riesgo de presentar un nivel bajo de azúcar en la sangre. Menos aumento de peso. El dispositivo para inhalar es pequeño.

Podría causar tos leve o intensa. Puede que sea más cara. Aún requiere inyecciones o una bomba para la insulina basal. La administración de la dosis no es tan precisa.

Asegúrese de hablar con su médico y con su educador sobre la diabetes cuando su estilo de vida o necesidades cambien. Ellos sabrán sobre los últimos dispositivos y tendrán consejos para hacer que la administración de la insulina y todos los aspectos de la diabetes sean más fáciles de manejar. ¿Necesita ayuda para encontrar a un educador sobre la diabetes? en su área. : Tipos de insulina

¿Por qué vía se inyecta la insulina?

ORIGINAL Insulinoterapia en el medio hospitalario Insulin therapy at the hospital setting J. Sáez de la Fuente*, V. Granja Berná*, M.A. Valero Zanuy**, J.M. Ferrari Piquero* y A. Herreros de Tejada y López Coterilla* *Servicio de Farmacia. Hospital Universitario 12 de Octubre.

  • Servicio de Endocrinología y Nutrición.
  • Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid. España.
  • Dirección para correspondencia RESUMEN La hiperglucemia se define en diversos estudios como un factor de mal pronóstico relacionado con un mayor riesgo de infecciones postoperatorias, complicaciones neurológicas, aumento de la estancia hospitalaria e ingreso en unidades de cuidados intensivos.

El uso adecuado de la terapia insulínica es una de las claves para asegurar el tratamiento óptimo del paciente ingresado en el hospital. El objetivo de esta revisión es discutir los aspectos más importantes del uso de insulina en el medio hospitalario.

Se analizan tanto los tipos de insulina existentes en el mercado y los principales factores que determinan su eficacia, como las diferentes pautas y vías de administración que encontramos en el hospital en función del tipo de paciente y del tipo de alimentación o aporte exógeno de hidratos de carbono.

El miedo a provocar episodios hipoglucémicos en el hospital, contribuye a una inadecuada prescripción de dosis programadas de insulina, a la utilización de pautas móviles de insulina rápida en monoterapia y al establecimiento de objetivos de glucemia demasiado elevados.

  • Actualmente el tratamiento individualizado de las hiperglucemias hospitalarias debe sustituir a pautas de insulina obsoletas, con el fin de alcanzar objetivos glucémicos más exigentes que disminuyan las complicaciones del paciente durante su ingreso hospitalario.
  • Palabras clave: Insulina. Pautas.
  • Hiperglucemia.

Hipoglucemia. ABSTRACT Hyperglycemia is defined in different studies as a poor prognostic factor relating with higher risk for post-surgical infections, neurological complications, increased hospital staying, and admission to intensive care units. Appropriate use of insulin therapy is one of the key factors assuring the best management of hospitalized patients.

The aim of this review was to discuss the most important aspects of insulin use at the hospital setting. We analyzed the different types of insulin commercially available and the factors determining their efficacy, as well as the different regimens and administration routes available at the hospital according to the type of patient and the type of feeding or exogenous intake of carbohydrates.

The fear of inducing hypoglycemic episodes at the hospital contributes to an inappropriate prescription of the programmed insulin doses, the use of flexible rapid insulin doses in monotherapy, and setting excessively high glycemia levels. Currently, individualized management of hospital hyperglycemias should replace obsolete insulin regimens in order to reach more stringent glycemia goals and decreasing the number of complications in the hospitalized patient.

  1. Ey words: Insulin. Regimens.
  2. Hyperglycemia.
  3. Hypoglycemia.
  4. Introducción En diversos estudios se define la hiperglucemia como un factor de mal pronóstico al haberse relacionado con un mayor riesgo de infecciones postoperatorias, complicaciones neurológicas, aumento de la estancia hospitalaria e ingreso en unidades de cuidados intensivos 1-4,

Por ello el uso adecuado de la terapia insulínica será una de las claves para asegurar el tratamiento óptimo del paciente ingresado en el hospital. Pero al hablar del manejo de la insulina en el medio hospitalario hay que diferenciar entre la diabetes previa al ingreso del paciente, la diabetes no diagnosticada y las hiperglucemias “hospitalarias” (secundarias a situaciones de estrés/enfermedad, a la descompensación de cualquiera de los tipos de diabetes o secundaria a la administración de fármacos como corticoides, vasopresores, etc.) 5,

  • Aunque el personal sanitario conoce la importancia de alcanzar un estrecho control de la glucemia, en muchas ocasiones no se le da la prioridad necesaria en el paciente hospitalario.
  • De esta forma, el manejo de la diabetes en el hospital se considera habitualmente un aspecto secundario comparado con la causa del ingreso.

Los pacientes diabéticos hospitalizados a menudo tienen un mal control glucémico, aumentando la posibilidad de complicaciones y de aumento de la estancia hospitalaria 6, Por todo ello, el objetivo de esta revisión es discutir los aspectos más importantes del uso de insulina en el medio hospitalario.

Tipos de insulina La insulina endógena sigue un patrón de secreción bifásico ( fig.1 ), caracterizado por dos componentes: • Una secreción basal pulsátil, que proporciona niveles constantes en ausencia de estimulo secretor y cuyo objetivo es reducir la síntesis hepática de glucosa, manteniendo las reservas suficientes para su consumo por parte del cerebro.

• Una secreción prandial, secundaria a la presencia de un estimulo secretor, que produce un pico en los niveles de insulina para estimular el consumo periférico de glucosa 7, Las insulinas comercializadas se clasifican, en función de su velocidad y duración de acción ( tabla I ), según intenten reproducir la secreción basal (insulinas de acción intermedia y prolongada) o prandial (acción rápida). Los análogos de acción rápida presentan un inicio de acción más temprano, de aproximadamente 15 minutos, comparada con los 30 minutos de la insulina regular. La ventaja teórica de los análogos de acción rápida sería la mejora de la calidad de vida del paciente, gracias a su rápido inicio de acción, que permite administrar las dosis justo antes o incluso después de las comidas 13, Los análogos de insulina de acción prolongada se caracterizan por tener mayor semivida. Su ventaja teórica radica en una mayor reproducibilidad de efecto gracias a un perfil farmacodinámico ausente de los picos y valles característicos de insulinas como NPH 14, Sin embargo, al comparar glargina (primer análogo de acción prolongada comercializado) con NPH, en numerosos ensayos controlados randomizados abiertos 15-17, no se encuentran diferencias en cuanto a niveles de HbA1c, aunque en alguno aparecen reducciones mínimas (0,1-0,5%) a favor del análogo. Otros estudios muestran una menor incidencia de episodios hipoglucémicos en el grupo tratado conéste análogo de acción prolongada 15-22, con un control más estrecho de la glucemia en ayunas 18, 19, Además, glargina presenta una ventaja real, ya que puede administrarse una vez al día. Aun así NPH debe considerarse de primera elección y glargina una alternativa a ella, ya que aunque disminuye los episodios hipoglucémicos, aumenta el coste de la terapia, no obtiene una mayor reducción de los niveles de Hb1c y de la ganancia de peso, y no se conocen sus efectos adversos a largo plazo 23, El último análogo de acción prolongada comercializado es insulina detemir. Tiene una semivida ligeramente menor que la de glargina, y algún estudio muestra ventajas frente a esta en cuanto a una menor variabilidad interindividual y un menor aumento de peso 24, Por otra parte, frente a NPH, aunque en el estudio de Home y cols., es superior detemir 25, se ha cuestionado el diseño y la interpretación de los resultados de este trabajo 26, la mayoría de los estudios comparativos con NPH no encuentran diferencias estadísticamente significativas en cuanto a la reducción de HbA1c, pero si que atribuyen a detemir, una disminución de la variabilidad interindividual, del número de episodios hipoglucémicos y de la ganancia de peso 27-32, aunque muchos de ellos han sido asimismo criticados en cuanto a metodología y resultados. En cualquier caso, al utilizar cualquier tipo de análogo de insulina, se debe tener en cuenta que suponen un incremento del coste del tratamiento, y que no existen estudios de seguridad a largo plazo, por lo que se recomienda cautela, sobre todo en poblaciones especiales como niños, embarazadas y mujeres en periodo de lactación 8, 23, Vías de administración Las dos vías fundamentales de administrar la insulina son la vía subcutánea y la intravenosa. • Por vía subcutánea se pueden utilizar dos métodos: 1. Inyecciones múltiples subcutáneas (IMS), administrando únicamente insulina de acción basal o prandial en regímenes simples, o ambos componentes en una terapia intensiva más compleja, ya sea por separado o en forma de insulinas bifásicas premezcladas comercializadas en proporciones fijas (30/70,50/50, etc.). Se pueden usar viales o plumas (recargables o de usar y tirar) con los diferentes sistemas de administración creados por la industria (optiset ®, flexpen ®, innolet ®, etc.). Todas las presentaciones tienen una concentración de 100 UI/mL, y aunque en el medio ambulatorio los pacientes prefieren las plumas 32-34, los viales son preferibles en el medio hospitalario por su versatilidad y por evitar errores que se pueden producir por la dificultad de conocer el funcionamiento de los diferentes sistemas de administración de la industria.2. Sistemas de infusión continúa de insulina (SICI), que consiste en un sistema de bombeo externo, conectado al tejido subcutáneo del abdomen por un catéter. Permite administrar una infusión continua de insulina rápida regular o sus análogos, así como bolos de dosis extras, con lo que cubren tanto las necesidades basales como las prandiales 35, Las ventajas principales de los SICI son la disminución de la variabilidad interindividual de la acción de la insulina y la posibilidad de programar la infusión basal, a diferencia de las IMS, que al administrar la insulina basal de acción prolongada no permiten modificar su efecto hasta que se elimina del organismo 36, Su principal problema es su elevado coste 37 que lo hace poco eficiente para su uso en el medio hospitalario. • Por vía intravenosa se pueden administrar bolos o infusión continua de insulina de acción rápida. Objetivos glucémicos En los últimos años, tras los resultados de diversos estudios en los que se relacionan niveles altos de glucemia con un aumento de las complicaciones hospitalarias 1, 2, el rango objetivo de glucemia a alcanzar ha ido disminuyendo progresivamente. Las recomendaciones de la ADA (American Diabetes Association) son mantener la glucemia plasmática en ayunas (GPA) menor de 110 mg/dL y la glucemia plasmática posprandial (GPP) en menos de 180 mg/dL 5, Pacientes con glucemias superiores a 220 mg/dL tendrían un riesgo de infección 2,7 veces mayor que aquellos con niveles inferiores, mientras que aquellos con glucemias en ayunas inferiores a 126 mg/mL y glucemia global inferior a 200 mg/dL, tendrían un mejor pronostico 2, En el caso de las unidades de cuidados intensivos (UCI), diversos estudios se han llevado a cabo para fijar un rango de glucemias óptimo, con el que disminuir la mortalidad y complicaciones de los pacientes. En este sentido, cabe destacar los trabajos llevados a cabo por Van den Berghe y cols., tanto en UCI médica 38 como quirúrgica 39, comparando pacientes con terapia intensiva de insulina y glucemias medias comprendidas entre 80-110 mg/dL, con aquellos con glucemias comprendidas entre 180 y 200 mg/dL. En ambos estudios se encuentran diferencias significativas en cuanto a morbilidad, pero en mortalidad la diferencia solo es significativa en UCI quirúrgica (RR = 1,7 p < 0,04) y no así en UCI médica (RR = 1,07 p = 0,33). En el análisis conjunto de los dos trabajos 40, la disminución de la mortalidad en el grupo de terapia intensiva si es significativa (RR = 1,16 P = 0,04), con un mayor beneficio en pacientes con estancia superiores a 3 días, y ninguno en aquellos con historial previo de diabetes. A raíz de estos resultados, y de los hallazgos de estudios posteriores de este mismo grupo, Van den Berghe y cols., recomiendan mantener glucemias entre 80-110 mg/dl. Sin embargo, aunque la mayoría de los autores consideran que los pacientes sometidos a estrés metabólico deben mantener un control glucémico estricto, mantener valores de glucemia plasmática en el límite recomendado por Van den Berghe y cols., no está exento de riesgo, en especial en pacientes sometidos a infusión continúa de insulina en la solución de NP o en pacientes sedados. De hecho, en el estudio de estos autores los episodios de hipoglucemia eran más frecuentes en el grupo de control intensivo. Por ello, la mayoría de los expertos consideran que los niveles de glucosa plasmáticos en estos casos se deben mantener por debajo de 150 mg/dL 41, 42, En el medio hospitalario, el valor de la HbA1c queda relegado a un segundo plano debido a que es un indicador del control glucémico a largo plazo. Aun así puede ser útil en el caso de diabetes o sospecha de ésta, siendo los niveles a alcanzar menores de un 7,0% según la ADA 43, o del 6,5% para la AACE (American Asociation of Clinical Endocrinologist) 44, Tipos de terapia Terapia vía subcutánea a) Componentes de las pautas de insulina Mayoritariamente la insulina en el hospital se utiliza vía subcutánea. Los componentes de la dosis de insulina se pueden dividir en basal, nutricional y correctora. Tanto la basal como la nutricional se prescriben como dosis programadas, y en cambio las dosis de corrección se pautan mediante algoritmos. La dosis inicial de insulina programada debe establecerse atendiendo a la situación individual del paciente, a su peso corporal, a los aportes nutricionales y a los fármacos que se le administran, así como a sus requerimientos en caso de terapia previa con insulina 45, Los requerimientos basales se pueden cubrir con SICI, insulinas de acción intermedia o de acción prolongada. En pacientes no tratados previamente, una vez calculada la dosis total diaria por kg, la dosis basal normalmente corresponde al 40-50% de ésta. A los pacientes tratados previamente con insulina que pueden ingerir alimentos, se les administra un medio o dos tercios de la dosis de insulina de acción intermedia/prolongada que se estuviera administrando, ya que en el hospital los pacientes normalmente disminuyen la ingesta de alimentos y tienen una dieta más controlada que en el medio ambulatorio 46, En el caso de utilizar insulina NPH un 60-70% de la dosis calculada se administrará para la cobertura diurna (antes del desayuno o antes del almuerzo) y el 30-40% restante para los requerimientos nocturnos (antes de la cena o al acostarse) 47, Glargina en cambio se administra en una única dosis. En el caso de los pacientes que cambien de NPH a glargina, si se administraban NPH dos veces al día deben reducir su dosis diaria de insulina basal entre un 20 y un 30%, con el fin de minimizar el riesgo de hipoglucemia nocturna y matutina. En el caso de administrarse NPH una vez al día, al cambiar a glargina no haría falta modificar la dosis 48, La insulina detemir al igual que NPH se administra cada 12 horas con el mismo cálculo de porcentajes. Tanto en DMT1 como DMT2 el cambio desde el tratamiento con NPH a detemir puede hacerse unidad por unidad, ajustándose luego según los objetivos glucémicos 49, La dosis nutricional depende del aporte exógeno de hidratos de carbono, que en el medio hospitalario puede ser en forma de alimento en las comidas (dosis prandial), de infusiones de glucosa intravenosa, nutrición parenteral o nutrición enteral 45, La dosis de insulina prandial en pacientes con dieta oral se puede calcular mediante la técnica del contaje de carbohidratos. Si se desconoce cuanta cantidad de comida se ingerirá, puede ser útil utilizar análogos de insulina rápida justo después de la comida, ya que tienen un tiempo de acción más corto. En los casos en los que el horario y la cantidad de comida no sean constantes habrá que tener cuidado al utilizar insulinas como la NPH, que tienen un componente tanto basal como prandial 5, También habrá que prestar atención al cambiar de insulina regular a un análogo de acción rápida, ya que como su velocidad de absorción es mayor, si no se reduce la dosis se corre el riesgo de hipoglucemias antes de la comida 50, Por último la dosis correctora se pauta en forma de algoritmos que suplementan a la dosis programada (basal más nutricional). Se utiliza de forma puntual, para tratar hiperglucemias que pueden aparecer antes o entre las comidas, provocadas por cambios rápidos en los requerimientos de insulina. Además, junto con la dosis programada, es una herramienta muy útil para fijar la dosis diaria necesaria de insulina. La dosis de corrección se deben pautar con insulina rápida o sus análogos, utilizando escalas tabuladas en función del tipo de paciente, atendiendo al peso corporal, la dosis total diaria, y la glucemia sanguínea ( tabla II ) 47, Para la mayoría de los pacientes con sensibilidad a la insulina, 1 unidad de insulina rápida disminuye la concentración de glucosa en 50-100 mg/dL 51, Cuando el paciente necesita varias dosis correctoras puntuales, se aconseja incrementar la dosis programada del día siguiente para satisfacer el aumento de sus requerimientos 45, El ajuste debe ser progresivo, y hay que prestar especial atención a la dosis de antes de dormir para evitar posibles hipoglucemias nocturnas. b) Pautas móviles de insulina rápida (sliding scales) Las dosis correctoras antes mencionadas, no deben ser confundidas con las pautas móviles. Estas consisten en cantidades predeterminadas de insulina de acción rápida, administradas en situaciones de hiperglucemia, normalmente empezando con 2 unidades para glucemias > 150-200 mg/dL e incrementándose en 2 unidades por cada 50 mg/dL que aumenten los niveles de glucosa ( tabla III ). Son independientes del horario de la comida, la presencia o ausencia de dosis previas de insulina, que en muchos casos se suspenden al ingreso, y de la sensibilidad individual de cada paciente 52, Este tipo de pautas no son recomendables, ya que en primer lugar, suelen permanecer inalteradas desde el ingreso en el hospital y, por lo tanto, no atienden a las variaciones en las necesidades del paciente. En segundo lugar, en vez de prevenirla tratan la hiperglucemia cuando ya ha ocurrido y están asociadas a una mayor dificultad para estabilizar el control glucémico 53,54, ya que pueden generar picos y valles en los niveles de insulina 55, Aun así, las pautas móviles pueden ser útiles en ciertas ocasiones, al ajustar la dosis de la comida en función de la glucemia preprandial y la cantidad de hidratos de carbono que se vayan a ingerir, al evaluar la respuesta inicial a la insulina y al tratar pacientes que reciben nutrición parenteral o enteral continua, en los que cada periodo de 6 horas es similar al anterior 46, Pero en general, es preferible utilizar insulinas de acción intermedia/prolongada una o dos veces al día, aunque sea a dosis pequeñas, y en el caso de utilizar pautas móviles, se recomienda revisar la pauta frecuentemente para ajustarla a los cambios en la glucemia del paciente. c) Tipo de pacientes En los pacientes con DM tipo 1 la dosis inicial es de 0,5-0,7 UI/kg/día. Si la ingesta esta reducida hay que utilizar el 50% de la dosis por kg de peso calculada 5, En la DM tipo 2, en pacientes no tratados previamente con insulina e ingesta calórica adecuada, la dosis inicial es de 0,4-1 UI/kg/día. En el medio hospitalario la insulina tiene varias ventajas frente a los ADO, ya que además de las limitaciones de cada grupo de fármacos, estos aportan poca flexibilidad en un medio en el que los pacientes están sometidos a cambios bruscos 5, En pacientes tratados previamente con insulina, al suspender los ADO habría que aumentar la dosis de insulina, ya sea en forma de bolos prandiales, en aquellos pacientes que recibían dos dosis diarias de insulina intermedia/prolongada, o añadiendo una dosis por la mañana de insulina intermedia/prolongada en pacientes tratados previamente solo con una dosis nocturna. En los pacientes con DMT2, con baja ingesta calórica, que no tengan una deficiencia importante de insulina, en situaciones normales se pueden controlar sin prescribirles dosis de insulina programadas, únicamente con sus reservas endógenas y un suplemento en forma de dosis correctora 5, Una situación especial en el hospital es la nutrición artificial. Si el paciente está sometido a nutrición parenteral, la insulina se puede administar vía intravenosa en infusión continua utilizando insulina rápida diluida en un suero 56 o en la solución 57-59, o bien vía subcutánea con insulina rápida o intermedia 60, No existen ensayos clínicos que comparen diferentes estrategias de utilización de insulina en pacientes con NPT. Es mejor utilizar insulinas de acción rápida intravenosas o subcutáneas, ya que son pacientes inestables que necesitan cambios continuos y que difícilmente van a ser controlados con insulinas de acción prolongada 60, Si el paciente está sometido a nutrición enteral (NE) continua, una vez estabilizado se puede administrar ADO o insulinas intermedias o sus análogos. Si la NE se administra en forma de bolos pandriales es mejor utilizar insulina rápida o sus análogos antes de cada toma e insulina intermedia o sus análogos en una o dos dosis al día según el control glucémico. Infusión continua intravenosa Las indicaciones de la infusión continua intravenosa que aparecen en la literatura son básicamente aquellas en las que se necesitan ajustes rápidos de la dosis, como son la cetoacidosis diabética y estados hiperosmolares 61, el preoperatorio, intraoperatorio y postoperatorio 80, y las unidades de cuidados intensivos 63,64, También pueden servir como estrategia para ajustar la dosis de insulina al comenzar o reiniciar una pauta subcutánea, y para tratar aquellos pacientes que no alcanzan un control óptimo con la vía subcutánea (> 350 mg/dL) 64, Si se compara con la administración subcutánea, la vía intravenosa permite una mayor flexibilidad y un incremento de la velocidad de acción, que permite un control rápido de los valores de glucosa sanguínea 57, Además, produce un depósito predecible de insulina, con lo que su efecto es menos variable. En las unidades de cuidados intensivos la utilización de insulina subcutánea en vez de infusión intravenosa puede generar acumulación del efecto de la insulina causando hipoglucemia o incluso disminuir su absorción en situaciones de vasoconstricción periférica. Para reducir estos efectos, las posibles alternativas son la infusión intravenosa o bolos intravenosos de insulina rápida 65, El inicio de la infusión en pacientes puede comenzar a 1 UI/h, ajustándola a la normoglucemia 5, Para calcular la dosis inicial por hora, en pacientes previamente tratados se puede asumir que es el 50% de la dosis que necesitaba previamente, dividida por 24 horas 46, 66, Otra alternativa es calcular la dosis por kg de peso, con 0,02 UI/kg/h como ritmo de infusión inicial. En caso de bajo peso corporal, insuficiencia renal, hepática o solapamiento con dosis previas de insulina, deben utilizar ritmos menores. En cambio en situaciones de hiperglucemia, resistencia a la insulina o aumento de los requerimientos, los ritmos de infusión pueden ser incluso superiores a 2 UI/h. Hasta la estabilización de los niveles de glucosa sanguínea durante 6-8 horas, deben hacerse controles horarios de la glucemia, que después se pueden reducir a cada 2-3 horas 46, El rango objetivo de glucosa en sangre es de 80 a110 mg/dL en pacientes críticos quirúrgicos 63, una glucemia plasmática en ayunas (GPA) menor de 105 mg/dL en mujeres embarazadas 67 y una GPA de 90 a 130 mg/dL y una glucemia plasmática posprandial (GPP) menor de 180 mg/dL en el resto de pacientes 43, Existen múltiples algoritmos para modificar el ritmo de infusión en función de los niveles de glucosa en sangre. En general es preferible utilizar pautas tabuladas que facilitan la interpretación al personal de enfermería, en vez de complicadas fórmulas matemáticas 68, Para hacer el cambio a una pauta subcutánea de la dosis diaria intravenosa, el 50% se debe administrar como insulina basal, y el resto en forma de dosis prandial. Además hay que tener en cuenta que antes de finalizar la infusión se debe administrar por vía subcutánea una dosis de insulina 1-2 horas antes si es de acción rápida o 2-3 horas antes si es de acción prolongada 46, El objetivo es evitar que se solape el efecto de la inyección con el de la infusión intravenosa, pero sin dejar de cubrir las necesidades basales. Conclusión En conclusión, actualmente el tratamiento individualizado de las hiperglucemias hospitalarias debe sustituir a pautas de insulina obsoletas. El miedo a provocar episodios hipoglucémicos en el hospital, contribuye a una inadecuada prescripción de dosis programadas de insulina, a la utilización de pautas móviles de insulina rápida en monoterapia y al establecimiento de objetivos de glucemia demasiado elevados 53, 54, 69, Otros errores comunes en el manejo de la glucemia intrahospitalaria son mantener la misma orden de tratamiento desde el ingreso del paciente, la falta de ajuste individualizado del tratamiento, la subestimación de la importancia del control glucémico, la infrautilización de infusiones intravenosas de insulina y el abuso de pautas móviles 5, En pacientes quirúrgicos y críticos, debido a la relación entre hiperglucemia y el aumento de la morbi-mortalidad, se recomienda la utilización de terapias intensivas de insulina, que son consideradas más coste efectivas en cuanto a la reducción del coste hospitalario, comparada con la terapia convencional 70, En el paciente ingresado en planta se recomienda establecer protocolos específicos, algoritmos de tratamiento, así como coordinación entre los diferentes profesionales y comunicación con el paciente. 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¿Qué pasa si se aplica mal la insulina?

¿Sabes qué es la sobredosis de insulina? Donde Se Inyecta La Insulina mágen © iStockphoto.com / Dmitry Lobanov Si tienes diabetes sabrás que la insulina juega un papel vital para regular tu condición. Para que la insulina surta el efecto deseado, debes administrarla en la dosis correcta. Sin embargo, en ocasiones el cálculo puede fallar o puede ser que otros factores como no comer o hacer ejercicio tengan influencia en su absorción y el resultado sea una sobredosis de insulina.

Entérate en qué consiste, cuáles son los síntomas y qué debes hacer en caso de sufrir una sobredosis de insulina. Marcelo tiene diabetes tipo 1 y siempre tiene que inyectarse insulina. Luisa, tiene diabetes tipo 2 y también necesita inyectarse insulina, pues los medicamentos orales (tomados) no le funcionaron para controlar sus niveles de azúcar en la sangre.

Como ves, tanto si tienes diabetes tipo 1 (cuando el cuerpo no produce insulina) como en algunos casos de diabetes tipo 2 (cuando el cuerpo no produce suficiente o tiene resistencia a ella – no responde adecuadamente a ella), la insulina es clave. Por eso, pensar en que puedes sufrir una sobredosis de insulina puede sonar a algo que no tendría por qué suceder si sabes exactamente la dosis que debes administrarte y si estás supervisado muy de cerca por tu médico.

Si estás usando un dispositivo nuevo o no sabes leer bien o interpretar la dosis que debes usar. A pesar de que te inyectas la cantidad indicada, te inyectas el tipo de insulina equivocada. Por ejemplo, si usas “X” número de unidades de insulina de acción prolongada y te inyectas ese mismo número de unidades de insulina de acción corta. Esto puede suceder con frecuencia. Si te inyectas insulina y no comes después de inyectarte. Esto puede causar que el azúcar en tu sangre se baje a niveles peligrosos. Cuando te inyectas la cantidad adecuada, pero lo haces en una pierna o en un brazo justo antes de hacer ejercicio. Recuerda que el ejercicio afecta la absorción de la insulina y más si la inyectas en un lugar que vas a ejercitar.

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Si te llegara a suceder una sobredosis de insulina, entonces sufrirás una disminución en tus niveles de glucosa en la sangre. Este fenómeno que se conoce como hipoglicemia o hipoglucemia. Los síntomas no se hacen esperar. Puedes experimentar:

Fatiga o cansancio Irritabilidad Mucha hambre Ansiedad Confusión Sudoración fría Temblores en las manos

Cuando la glucosa (azúcar) en tu sangre baja a niveles exagerados, es peligroso porque puedes sufrir convulsiones y perder la conciencia (desmayarte). Así que si notas estos síntomas, debes actuar de inmediato. ¿Qué puedes hacer si piensas que estas sufriendo de una sobredosis de insulina? En primer lugar, debes chequear tu nivel de azúcar.

Come algo que contenga carbohidratos. Toma media taza de jugo de frutas endulzado o medio vaso de soda regular. Comer un caramelo también sirve. Descansa. Luego de 15 a 20 minutos de comer o beber, revisa nuevamente tu glucosa. Si notas que aún está baja, nuevamente come o bebe algo que suba rápidamente el azúcar en tu sangre (15 gramos de carbohidratos). Observa si sigues con síntomas.

Si luego de que hiciste lo anterior te sientes mal, busca atención médica de inmediato. Es muy importante procurar mantener el nivel del azúcar cerca de lo normal, pero así como no es bueno tener el azúcar elevado en la sangre (hiperglicemia), cuando se producen episodios de hipoglucemia por exceso de medicina para la diabetes o por sobredosis de insulina también es peligroso.

¿Cuál es la mejor hora para ponerse la insulina?

Está comprobado que se controla mejor la subida de azúcar en sangre después de las comidas, si ponemos la insulina rápida de 15 a 20 minutos antes de comer.

¿Qué pasa si un diabético no se inyecta insulina un día?

Las consecuencias del racionamiento de la insulina – No cumplir con su tratamiento con insulina puede causar cetoacidosis diabética, la cual ocurre cuando su cuerpo no produce su propia insulina (o la suficiente). Sus niveles de azúcar en sangre llegan a ser tan elevados que la sangre se vuelve ácida, las células se deshidratan, y el cuerpo deja de funcionar.

¿Qué es mejor la insulina o las pastillas?

2. Compare sus opciones –

Usar insulina No usar insulina
¿Qué implica generalmente?
  • Usted se da insulina a sí mismo de 1 a 4 veces al día. La mayoría de las personas hacen esto dándose una inyección. Algunas personas pueden utilizar un inhalador para usar insulina de acción rápida.
  • Usted controla sus niveles de azúcar en sangre varias veces al día para asegurarse de que sus niveles se hallan dentro de los límites ideales.
  • Usted se mantiene en un peso saludable y hace ejercicio con regularidad.
  • Usted conoce las señales de azúcar baja en la sangre, cómo evitar el azúcar baja en la sangre y qué hacer en caso de una urgencia de azúcar baja en la sangre.
  • Usted controla sus niveles de azúcar en la sangre para asegurarse de que sus niveles se hallan dentro de los límites ideales.
  • Usted trata de bajar de peso y hacer más actividad para controlar el azúcar en la sangre.
  • Usted toma medicamentos para la diabetes para reducir la resistencia del cuerpo a la insulina. O si ya está tomando medicamentos para la diabetes, es posible que necesite aumentar su dosis.
¿Cuáles son los beneficios?
  • La insulina es el medicamento más eficaz para bajar los niveles de azúcar en la sangre.
  • Mantener el azúcar en la sangre bajo control reduce su riesgo de problemas de salud causados por la diabetes. Estos problemas incluyen problemas de la vista, enfermedad renal y daño nervioso.
  • No tiene que ponerse una inyección usted mismo.
  • No tiene que hacerse pruebas pulmonares relacionadas con el uso de la insulina inhalable.
  • No tiene que preocuparse tanto sobre urgencias de azúcar baja en la sangre que le pueden pasar si usa insulina.
¿Cuáles son los riesgos y efectos secundarios?
  • Usar insulina aumenta su riesgo de azúcar muy baja en la sangre, la cual es potencialmente mortal si no se maneja inmediatamente.
  • Es posible que suba de peso si usa insulina.
  • Si empeora su diabetes, es posible que no pueda controlar su azúcar en la sangre.
  • Puede subir de peso mientras toma medicamentos para la diabetes.
  • Usted está en riesgo de urgencias por azúcar alta en la sangre, la cual es potencialmente mortal.
  • El azúcar en la sangre fuera de control aumenta su riesgo de problemas de salud como problemas de la vista, daño nervioso y enfermedad renal.

¿Dónde se absorbe más rápido la insulina?

La insulina es absorbida más rápidamente en la pared abdominal, de forma más lenta en la pierna (muslo) y la nalga, y a una velocidad intermedia en el brazo; en cualquiera de estos sitios, la rapidez de la absorción de insulina varía inversamente con el grosor de la grasa subcutánea.

¿Qué pasa si se ingiere insulina vía oral?

La insulina no puede administrarse por vía oral, ya que sería metabolizada al llegar al estómago, antes de ingresar en el torrente sanguíneo. Es por eso que se inyecta bajo la piel.

¿Cuánto es lo máximo que se puede inyectar de insulina?

PDM Descripción: Análogo de insulina humana de acción rápida, con un inicio de acción a los 30 minutos, el efecto máximo se presenta a las 1,5 a 3,5 horas, con una duración de acción aproximada de 7-8 horas. Actualmente disponemos de:

Insulina humana de acción rápida producida en cepas de Saccharomyces cerevisiae (Actrapid®).Insulina humana de acción rápida producida en cepas de E. coli (Humulina®).

USO CLÍNICO: Tratamiento de la diabetes mellitus ( A ). En niños:

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Cetoacidosis diabética ( E: off-label ).Hiperkalemia ( E: off-label ).Hiperglucemia hiperosmolar ( E: off-label ).

DOSIS Y PAUTAS DE ADMINISTRACIÓN: Diabetes mellitus : Administración subcutánea. Tipo 1. Las dosis habituales de mantenimiento oscilan entre 0,5-1,5 UI/kg/día. Los requerimientos de insulina son específicos para cada paciente y varían en función de la edad, peso corporal

Prepúberes: 0,7-1 UI/kg/día.Durante la pubertad: pueden necesitar hasta 1,5 UI/kg/día.Pospúberes: 0,7-0,8 UI/kg/día.

En los 30 minutos siguientes a una inyección, deben tomarse alimentos que contengan hidratos de carbono. Cetoacidosis diabética:

Administración intravenosa.0,1 UI/kg/hora. Ajuste de dosis: si la glucosa no se reduce por 50 mg/dl en la primera hora, verificar el estado de hidratación, si este es aceptable duplicar la dosis de insulina cada hora hasta que los niveles de glucosa se reduzcan 50-75 mg/dl por hora. Una vez que el valor de glucosa sea 250 mg/dl, reducir la dosis a 0,05-0,1 UI/kg/hora.Administración subcutánea e intramuscular. Solo si el acceso venoso no está disponible: 0,1-0,3 UI/kg por vía subcutánea, seguidos de 0,1 UI/kg/hora por vía subcutánea o intramuscular, o 0,15-0,2 UI/kg cada 2 horas por vía subcutánea, hasta la resolución de la acidosis. Administrar entonces 0,05 UI/kg/hora.Hiperkalemia (moderada a grave). Administración intravenosa 0,1 UI/kg junto con 2 ml/kg de glucosa 50% en 15-30 minutos.

Hiperglucemia hiperosmolar: Administración intravenosa: 0,1 UI/kg/hora. Ajuste de dosis: si la glucosa no se reduce por 50 mg/dl en la primera hora, verificar el estado de hidratación, si este es aceptable duplicar la dosis de insulina cada hora hasta que los niveles de glucosa se reduzcan 50-75 mg/dl por hora.

  • Una vez que el valor de glucosa sea 300 mg/dl, reducir la dosis a 0,05-0,1 UI/kg/hora.
  • Administración subcutánea e intramuscular.
  • Solo si el acceso venoso no está disponible: 0,1-0,3 UI/kg por vía subcutánea, seguidos de 0,1 UI/kg/hora por vía subcutánea o intramuscular, o 0,15-0,2 UI/kg cada 2 horas por vía subcutánea, hasta la resolución de la hiperosmolaridad.

Administrar entonces 0.05 UI/kg/hora. CONTRAINDICACIONES: Hipersensibilidad a la insulina humana de acción rápida o alguno de los excipientes. Hipoglucemia. PRECAUCIONES:

Pacientes con riesgo de hipokalemia. Monitorizar concentraciones de potasio.Pacientes a tratamiento concomitante con pioglitazona vigilar la aparición de signos y síntomas de insuficiencia cardiaca, ganancia de peso y edema.Insuficiencia renal: no datos en niños. Si Clcr 10-50 ml/minuto, administrar el 75% de la dosis y controlar los niveles de glucose. Si Clcr <10 ml/minuto, administrar entre el 25-50% de la dosis y controlar niveles de glucosa. En caso de terapia renal de reemplazo continuo, administrar el 75% de la dosis y controlar los niveles de glucosa.Insuficiencia hepática: no datos en niños. Los requerimientos de insulina pueden verse reducidos.

Controlar los niveles de glucosa. EFECTOS SECUNDARIOS: Hipoglucemia. Es la reacción adversa más frecuente (≥10%). Reacciones anafilácticas: la aparición de reacciones de hipersensibilidad generalizada (que incluyen exantema cutáneo generalizado, prurito, sudor, molestias gastrointestinales, edema angioneurótico, dificultad en la respiración, palpitaciones e hipotensión) es muy rara, pero estas pueden ser potencialmente mortales.

  1. Consultar ficha técnica para una información más detallada.
  2. En caso de sobredosis, los episodios hipoglucémicos leves se pueden tratar con administración oral de glucosa o productos de alto contenido en azúcar.
  3. Los episodios hipoglucémicos graves, con pérdida de conocimiento, se pueden tratar con glucagón administrado por vía intramuscular o subcutánea, o bien con glucosa por vía intravenosa.

Además, se debe administrar glucosa intravenosa, si el paciente no responde al glucagón en 10-15 minutos. Se recomienda la administración oral de hidratos de carbono al paciente una vez recuperada la consciencia, a fin de prevenir una recaída. INTERACCIONES FARMACOLÓGICAS: Monitorizar cuidadosamente a los pacientes si se produce la administración concomitante con:

Betabloqueantes, inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (IECA), salicilatos, sulfonamidas, agentes hipoglucemieantes: disminuye requerimientos de insulina.Corticoides, tiazidas, glucocorticoides, hormona tiroidea, hormona del crecimiento, danazol: aumenta los requerimientos de insulina.

DATOS FARMACÉUTICOS: Excipientes: los excipientes pueden variar en función de la especialidad farmacéutica. Consultar ficha técnica. Conservación: no congelar. No exponer al calor excesivo ni a la luz solar directa. Conservar entre 2-8 °C. Las condiciones de conservación durante el uso pueden variar en función de la especialidad farmacéutica, consultar ficha técnica.

Validez. Puede variar en función de la especialidad farmacéutica, consultar ficha técnica. Compatibilidad. Puede variar en función de la especialidad farmacéutica, consultar ficha técnica. Presentaciones comerciales: las presentaciones disponibles en España pueden consultarse online en el Centro de Información de Medicamentos de la AEMPS (CIMA), http://www.aemps.gob.es/cima, y en https://www.aeped.es/comite-medicamentos/pediamecum en el enlace “Presentaciones” correspondiente a cada ficha.

BIBLIOGRAFÍA:

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Fecha actualización: enero de 2021. La información disponible en cada una de las fichas del Pediamécum ha sido revisada por el Comité de Medicamentos de la Asociación Española de Pediatría y se sustenta en la bibliografía citada. Estas fichas no deben sustituir en ningún caso a las aprobadas para cada medicamento por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) o la Agencia Europea del Medicamento (EMA).

¿Qué pasa si se inyecta insulina en la vena?

La ingesta de dosis letales de insulina desencadena una hipoglucemia grave, es decir, la bajada extrema de azúcar en sangre que provoca la entrada en coma diabético – Cuando el organismo no es capaz de controlar los niveles de glucosa en sangre por sí mismo, la insulina se convierte en una herramienta imprescindible para controlarlo, convirtiéndose así en la solución médica que puede salvar la vida a las personas diabéticas, ya tenga diabetes tipo 1 o diabetes tipo 2.

  • Sin embargo, cuando esa insulina se administra mal o en exceso puede transformarse en un arma arrojadiza capaz de provocar la muerte de estos pacientes.
  • Es lo que se conoce como “sobredosis de insulina”.
  • ¿Qué provoca una sobredosis de insulina? En una persona diabética, el empleo excesivo de insulina puede resultar letal,

En concreto, la inyección de insulina provoca que el organismo entre en un cuadro grave de hipoglucemia, es decir, la bajada extrema del nivel de azúcar en sangre por debajo del umbral considerado normal, lo que equivale a unos 65 mg/dL. La hipoglucemia puede ser causada por diversos motivos, pero el más habitual se debe a un exceso de insulina en el organismo, lo que provoca que se libere más cantidad de la necesaria desde la sangre a las células, de modo que el cuerpo y el cerebro pierden su principal fuente de energía, que es la glucosa.

  1. De esta manera, la consecuencia directa en los casos más graves es la entrada en coma,
  2. Síntomas Ante una sobredosis de insulina en el organismo y, por tanto, el desarrollo de una hipoglucemia grave, el cuerpo reacciona de manera inmediata.
  3. En concreto, los síntomas que comienza a desarrollar son: -Temblores -Confusión -Visión borrosa -Pérdida de conocimiento -Convulsiones -Mareo La consecuencia final de todo ello es la entrada en lo que se conoce como coma diabético, es decir, la pérdida del conocimiento con graves consecuencias para el organismo, ya que puede resultar mortal,

¿Cómo se produce una sobredosis de insulina? La administración de insulina por parte de las personas diabéticas es una práctica diaria que se convierte en rutinaria. Sin embargo, no es baladí, ya que debe realizarse con un estricto control médico que marque la cantidad de insulina a inyectar según las características y condiciones de cada paciente.

  • Sin embargo, esa sobredosis puede aparecer en los siguientes casos: – Si se inyecta insulina y no se come nada después de ella,
  • Esta acción puede provocar que el azúcar en sangre baje a niveles mínimos, algo muy peligroso que puede derivar en hipoglucemia grave y, por tanto, en la entrada en coma de la persona.

Precisamente esto es lo que, a priori, pudo suceder con Josep María Mainat después de que su mujer le inyectara insulina, ya que al estar profundamente dormido su organismo desencadenó una hipoglucemia. -Si se inyecta un tipo de insulina equivocada, es decir, si se emplea insulina de acción corta en vez de insulina de acción prolongada.

¿Cómo se aplica la insulina antes o después de comer?

Insulina inyectada de acción rápida El inicio retrasado de la acción es la razón por la que tiene que inyectarse la insulina y esperar antes de comer. Y la duración variable de la acción predispone a bajas de azúcar en sangre mucho después de que haya terminado la comida.

¿Por qué duele la insulina?

Algunos pacientes sienten incomodidad cuando se inyectan insulina con pH ácido, como es el caso de insulina glargina. El pH ácido provoca sensación de picor o escozor. El volumen de unidades puede influir si es mayor de 45 unidades. A mayor volumen, aumenta la sensación de dolor.

¿Qué es mejor para la diabetes insulina o metformina?

¿Qué medicamentos orales tratan la diabetes tipo 2? – Es posible que la persona deba tomar medicamentos para controlar la diabetes tipo 2, además de consumir alimentos y bebidas saludables y mantenerse físicamente activa. Se pueden tomar muchos medicamentos para la diabetes por la boca.

  1. Estos medicamentos se conocen como medicamentos orales.
  2. La mayoría de las personas con diabetes tipo 2 comienzan con pastillas de,
  3. La metformina también viene en forma líquida.
  4. La metformina ayuda al hígado a producir menos glucosa y al cuerpo a darle mejor uso a la insulina.
  5. Este medicamento puede ayudar a perder una pequeña cantidad de peso.

Otros medicamentos orales actúan de diferentes maneras para reducir las concentraciones de glucosa en la sangre. La combinación de dos o tres tipos de medicamentos para la diabetes puede reducir las concentraciones de glucosa en la sangre más eficazmente que tomando solo un medicamento.

¿Cuántas unidades de insulina se aplica a un diabetico?

Primero, algunas cosas básicas que hay que saber sobre la insulina: –

  • Aproximadamente el 40-50% de la dosis de insulina diaria total es para reemplazar la insulina durante la noche, cuando está ayunando y entre las comidas. Esto se llama reemplazo de insulina de fondo o basal. La dosis de insulina basal o de fondo generalmente es constante día a día.
  • El otro 50-60% de la dosis de insulina total es para la cobertura de carbohidratos (comida) y corrección del azúcar alta en sangre, Esto se denomina reemplazo de insulina de bolo.

Bolo – Cobertura de carbohidratos La dosis de bolo para la cobertura de alimentos se prescribe como una relación de insulina a carbohidratos. La relación insulina a carbohidratos representa cuántos gramos de carbohidratos están cubiertos o se desechan por una 1 unidad de insulina.

Generalmente, una unidad de insulina de acción rápida descartará 12-15 gramos de carbohidratos. Este rango puede variar desde 6-30 gramos o más de carbohidratos, dependiendo de la sensibilidad de un individuo a la insulina. La sensibilidad a la insulina puede variar de acuerdo a la hora del día, de persona a persona, y se ve afectada por la actividad física y el estrés.

Bolo – Corrección del azúcar alta en sangre (también conocido como factor de sensibilidad a la insulina) La dosis de bolo para una corrección del azúcar alta en sangre se define como cuánto puede hacer caer el azúcar en sangre una unidad de insulina de acción rápida.

¿Qué pasa si tomo cerveza y me inyecto insulina?

Instrucciones de cuidado – Las personas que tienen diabetes deben tener más cuidado con el alcohol. Antes de beber, considere algunas cosas: ¿Está bien controlada su diabetes? ¿Conoce usted la forma en la que el alcohol puede afectar su salud? ¿Tiene presión arterial alta, daño en los nervios o problemas en los ojos debido a su diabetes? Si usted se inyecta insulina o toma otro medicamento para la diabetes, beber alcohol podría bajar el nivel de azúcar en la sangre.

  • Esto puede causar niveles bajos de azúcar en la sangre que pueden resultar peligrosos.
  • Demasiado alcohol también puede afectar su capacidad de detectar que el azúcar en su sangre está bajo y tratarlo.
  • Beber alcohol puede hacer que se sienta aturdido al principio y somnoliento (con sueño) a medida que bebe más.

Ambas cosas pueden ser similares a los síntomas de un nivel bajo de azúcar en la sangre. Beber mucho alcohol durante un período largo puede dañar el hígado (cirrosis). Si esto sucede, su cuerpo podría perder su reacción natural para protegerse contra el nivel bajo de azúcar en la sangre.

Si usted está controlando su diabetes y no tiene otros problemas de salud, quizás esté bien tomar una bebida de vez en cuando. Aprender sobre los efectos del alcohol en su cuerpo puede ayudarle a tomar las decisiones correctas. La atención de seguimiento es una parte clave de su tratamiento y seguridad.

Asegúrese de hacer y acudir a todas las citas, y llame a su médico si está teniendo problemas. También es una buena idea saber los resultados de sus exámenes y mantener una lista de los medicamentos que toma.

¿Cuando un diabético debe usar insulina?

Cuando tiene diabetes tipo 2, y la dieta, el ejercicio y otros medicamentos no pueden controlar el azúcar en sangre, o si no puede usar los medicamentos, será necesario tomar insulina. Esto se conoce como terapia de insulina, que le será recetada por el profesional médico. Cuando entiende cómo funciona la terapia de insulina en el cuerpo, puede controlar más fácilmente el azúcar en sangre.

¿Qué beneficios tiene la insulina para un diabético?

La terapia de insulina ayuda a prevenir las complicaciones de la diabetes porque mantiene el nivel de azúcar en sangre dentro de los límites deseados.

¿Cuál es la mejor hora para ponerse la insulina?

Está comprobado que se controla mejor la subida de azúcar en sangre después de las comidas, si ponemos la insulina rápida de 15 a 20 minutos antes de comer.

¿Qué horario es mejor para inyectar insulina?

La frecuencia de administración recomendada es de una dosis al día, preferentemente por la noche.

¿Cuánto tiempo puede durar la insulina fuera del refrigerador?

Almacenamiento y eficacia de la insulin – Insulina inyectable Con frecuencia, la insulina de distintos fabricantes está disponible para pacientes en una emergencia y puede ser diferente a la insulina habitual del paciente. Después de un desastre natural, los pacientes en el área afectada pueden no tener acceso a la refrigeración.

Según las etiquetas de los productos de los tres fabricantes de insulina de los EE. UU., se recomienda que la insulina sea almacenada en un refrigerador a aproximadamente entre 36 °F y 46 °F. Estos productos, sin abrir y almacenados de esta forma, mantienen su potencia hasta la fecha de vencimiento indicada en el envase.

Los productos de insulina contenidos en frascos o cartuchos suministrados por los fabricantes (abiertos o sin abrir) pueden estar sin refrigeración a una temperatura entre 59 °F y 86 °F por un período de 28 días como máximo y continuar actuando. Sin embargo, una insulina que ha sido alterada para fines de dilución o si se ha retirado del frasco original del fabricante debe ser descartada dentro de las dos semanas.

  • Nota: La insulina pierde cierta eficacia al estar expuesta a temperaturas extremas.
  • Cuanto más larga la exposición a temperaturas extremas, menos eficaz se vuelve.
  • Esto puede ocasionar pérdida del control de glucosa en la sangre con el tiempo.
  • En condiciones de emergencia, quizás todavía sea necesario que utilice insulina que ha estado almacenada a más de 86 °F.

Debe tratar de mantener la insulina lo más fría que sea posible. Si usa hielo, evite congelarla. No use la insulina que se ha congelado. Mantenga la insulina alejada del calor directo y fuera de la luz solar directa.

Cuando la insulina almacenada en forma adecuada esté disponible de nuevo, los frascos de insulina que hayan estado expuestos a estas condiciones extremas deben descartarse y ser reemplazados cuanto antes. Si los pacientes o profesionales sanitarios tienen preguntas específicas acerca de la idoneidad de la insulina que tienen, pueden llamar al fabricante respectivo a los siguientes números:Lilly: 1-800-545-5979Sanofi-Aventis: 1-800-633-1610Novo Nordisk: 1-800-727-6500

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