La transferencia es un concepto propuesto por Freud (1895, 1901, 1912) para designar el dispositivo que se organiza en la situación analítica y que permite la asociación libre y el análisis propiamente dicho, señalando que no se provoca, sino que tiene lugar, y que es lo que permite la interpretación.
¿Qué es la transferencia en psicología ejemplos?
Qué es la transferencia psicológica – En el caso de Dora, Sigmund Freud trató el tema de la transferencia. La definió como: Reediciones, reconstrucciones de emociones y fantasías que habrían de ser despertadas y hechas conscientes con el avance del análisis, con una característica sustitución de una persona más temprana por la persona del médico.
Para decirlo de otra manera: toda una serie de vivencias psíquicas tempranas se revitalizan, no como pasadas, sino como una relación actual con la persona del médico, Como expone Celedonio Castanedo (2008) Freud mencionaba que la transferencia puede implicar reediciones simples o inmodificadas de vivencias infantiles, o de reelaboraciones complejas y sublimadas.
Mientras que en los Estudios sobre la histeria (1895), el tema de la transferencia había sido tratado como un obstáculo, a la vez que Freud manifestaba su íntima vinculación con la resistencia, ahora es caracterizada como el medio auxiliar más eficaz del psicoanálisis.
La situación analítica adquiere su posibilidad terapéutica a través de las transferencias, pero sobre todo en las que se llegan a tornar comprensibles y vivenciales para el paciente. Así estas transferencias corresponden el centro del proceso psicoanalítico, ya que el analista se abstendrá de transmitir prohibiciones, consejos, opiniones, prescripciones y opiniones personales.
Las experiencias de la transferencia pueden manifestarse continuamente, pero también pueden ser rechazadas y reprimidas por el paciente, así el analista las señalará y las interpretará para que se pueda encontrar su naturaleza y luego disolverse por la labor interpretativa.
¿Qué es la transferencia y contratransferencia Freud?
Teoría psicoanalítica – La teoría psicoanalítica de Sigmund Freud fue fundamental en el desarrollo de los conceptos de transferencia y contratransferencia. Freud creía que la transferencia se basa en los patrones de relación y los deseos inconscientes que se originan en la infancia.
¿Qué es el fenomeno de transferencia?
La transferencia: ¿fenómeno universal o creación del psicoanálisis? Por Guillermo Nieto Delgadillo El psicoanálisis se caracteriza por tener como objeto de estudio las motivaciones inconscientes del individuo, ayudándolo así a enriquecer la totalidad de su personalidad, ya sea asistiéndolo para tolerar mejor sus impulsos amorosos u hostiles, o por medio de la comprensión de los aspectos más desconocidos de su conducta.
¿Cómo logra el psicoanálisis estas tareas? A grandes rasgos, podríamos decir que, entre otras herramientas, el psicoterapeuta cuenta con los sueños, los cuales muestran los contenidos más profundos de la mente, y con la llamada asociación libre, en la que el paciente dice todo lo que le venga a la cabeza intentando no discriminar los contenidos y ayudando así a desplegar, sin darse cuenta, sus aspectos emocionales predominantes en el momento.
Sin embargo, existe otra herramienta fundamental basada en un fenómeno muy interesante que el psicoanalista usa a lo largo de todo el tratamiento, incluso desde las entrevistas iniciales con el paciente: la transferencia. Si uno se dedica a leer textos de técnica psicoanalítica, encontrará en prácticamente todos ellos este concepto tan interesante, que en ocasiones puede sonar alejado de la cotidianeidad, o tan complicado, que parecería inaccesible a cualquier persona que no se dedique al psicoanálisis.
No obstante, la transferencia es un fenómeno universal e ineludible, pero que necesita ser estudiado y comprendido a profundidad para poder ser utilizado. Comencemos por lo básico: ¿Qué es la transferencia ? En términos generales, podemos decir que es un fenómeno inconsciente en el que la persona le adjudica a otros ciertos aspectos, cualidades o defectos, que, si bien le generan emociones genuinas, en realidad parece que se equivocaron de objeto, ya que, según la teoría freudiana, son repeticiones de los sentimientos y deseos con las primeras figuras de amor: los padres.
Pongamos un par de ejemplos: a todos nos ha pasado que una persona nos cae muy bien o muy mal instantáneamente. No sabemos por qué, pero no podemos evitar esa sensación agradable o desagradable. En la escuela teníamos al profesor “sangrón”, cuya clase se nos volvía insoportable, a pesar de que, en realidad, muy probablemente no era así.
- Por otro lado, teníamos a la profesora que esperábamos ver con ansias, a quien percibíamos como bondadosa y de la que nos queríamos ganar el afecto o la preferencia.
- ¿Qué nos sucedía y por qué tanto odio en un caso y tanto amor en el otro? ¿Eran en realidad así estos profesores? Uno tiende a percibir las cosas dependiendo de su propia realidad psíquica.
Desde escuchar una clase que se puede volver tediosa o entretenida, no tanto por el profesor, sino por nosotros, hasta ver una obra de teatro o escuchar un concierto. Probablemente los jefes y jefas no sean necesariamente tan malos como uno tiende a escuchar; son más bien los representantes de las figuras paternas de un niño que así percibía a papá o a mamá, y que ahora repite con sus superiores jerárquicos.
Nos relacionamos con los demás y con nuestras actividades siguiendo este fenómeno universal, espontáneo e inconsciente que es la transferencia, siendo el genio de Sigmund Freud quien lo descubrió (pongamos atención al verbo descubrir, no inventar), diseñando una técnica para poder discriminar y estudiar el fenómeno como si estuviéramos observando partículas invisibles al ojo humano, a través de un microscopio.
Al analizar la transferencia dentro del consultorio con nuestros pacientes, les permitimos percatarse de todos los conflictos que suelen repetir en sus vidas cotidianas, con una diferencia simple, pero fundamental: el terapeuta le explica esto al paciente por medio de una herramienta que se llama interpretación transferencial, en lugar de reaccionar como lo harían todas las figuras fuera del tratamiento psicoanalítico.
- Esta interpretación transferencial es la que distingue al psicoanálisis y la psicoterapia psicoanalítica de todas las otras terapias, y es la que le permite al paciente adquirir mayor conciencia de sí mismo y lograr cambios duraderos en su personalidad.
- Parece sencillo, pero, en la realidad, poder realizar esta tarea requiere un entrenamiento teórico y práctico de muchos años, además de un compromiso mental y emocional por parte del terapeuta y del paciente.
Desde 1905, año en el que se publicó el famoso epílogo del Caso Dora, en el que Freud describió por primera vez el fenómeno, ha habido aportaciones relevantes de otros genios a este concepto, como Melanie Klein, Wilfred Bion, etcétera, que lo han enriquecido y nos han permitido trabajar con una mayor variedad de pacientes.
¿Cómo descubre Freud la transferencia?
La transferencia para Greenson. – A lo largo de los años, el concepto inicial de transferencia se ha ido enriqueciendo con las aportaciones teóricas de diversos autores. Creo, que merece la pena citar la definición de transferencia propuesta por Greenson, pues aporta un nuevo elemento.
- Dice Greenson que “la transferencia es vivir fantasías, sentimientos, actitudes y defensas hacia una persona del presente que no resultan apropiados para esa persona o situación y que son repetición de una relación significativa del pasado, desplazada ahora hacia el presente”.
- Vemos que este autor incorpora un nuevo elemento “revivir defensas”.
Es decir, el paciente no sólo puede vivir fantasías y deseos reprimidos, sino que también puede volver a vivir y las defensas que utilizaba en su infancia. La naturaleza de las defensas que puede revivir el paciente es muy variada. Un paciente puede adoptar, por ejemplo, una actitud bondadosa, condescendiente, poco asertiva, plegándose continuamente a los deseos del analista.
- ¿Qué nos indica esto? Pues se trata, ni más ni menos, de la forma en que el sujeto reaccionaba en la infancia para huir de los conflictos y de la persecución.
- La transferencia es una resistencia a la terapia, pues según describió Freud, aparece cuando el paciente guarda silencio y cesan las asociaciones libres.
En ese momento los contenidos inconscientes que no pueden ser verbalizados se proyectan y se viven sobre el terapeuta. En este sentido, es la mejor de las resistencias (neurosis de transferencia), pues mediante ella el paciente transforma un recuerdo reprimido en algo presente, vivo y directo.
¿Qué es la transferencia en Lacan?
Para Lacan, por su parte, la transferencia implica al Otro, y es justamente en esa relación que aparece la transferencia ; más que como repetición y clisé, es un espacio entre el sujeto y el Otro, y hace énfasis en señalar la posición subjetiva y apuntar a su deseo, más allá que caer en su demanda.
¿Por qué es importante la transferencia en psicología?
La transferencia en psicología se utiliza para hablar de un aspecto importante del vínculo terapéutico y al conocer su origen es posible obtener un conocimiento mucho más objetivo de sus implicaciones prácticas.
¿Cómo se da la transferencia en el modelo educativo?
La transferencia se produce cuando una persona aplica experiencias y conocimientos previos al aprendizaje o a la resolución de problemas en una situación nueva. En consecuencia, si un estudiante aprende un concepto en la clase de matemáticas y luego lo aplica en la clase de ciencias, ha realizado una transferencia.